A menudo nos sorprendemos con el cheesecake, debido a sus elegantes presentaciones y a su relajante sabor. Y es que pareciera un postre reservado sólo para ocasiones especiales y expertos en repostería. Pero contrario a lo que se cree, es uno de los dulces más fáciles de preparar y presentar. La clave está en respetar los tiempos y utilizar correctamente los materiales.
Así lo verás a continuación, porque te mostraremos cómo hacer esta receta en su versión con coco.
Ingredientes
Para la masa:
- 1/2 taza de azúcar
- 1 yema de huevo
- 1 ½ de harina
- 2 cucharadas de mantequilla
Para el relleno:
- 3 yogurt sin sabor
- 1 tarro de leche condensada
- 100 gramos de coco picado
- 1 limón
¡Manos a la obra!
Para comenzar, precalienta el horno por 20 minutos a máxima potencia.
Luego, elabora la base del cheesecake: la masa. En un recipiente, mezcla el azúcar con la mantequilla hasta que quede sin grumos. Luego añade la harina de a poco, y mezcla hasta formar una masa.
Posteriormente, agrega la yema del huevo y amasa bien, hasta que resulte una bola apretada. Deja reposar por 10 minutos.
Mientras tanto, enmantequilla un molde y luego espolvorea unas cucharadas de harina. Sé lo suficientemente minucioso como para cubrir todos los espacios.
Una vez reposada la masa, insértala en el molde. No te preocupes si es demasiado delgada, pues así es la preparación. Hornea por 12 minutos a fuego medio, dependiendo de tu cocina (180 grados).
Durante el tiempo que dejamos la masa en el horno, podemos preparar el relleno. En un recipiente, mezcla la leche condensada con el yogurt. Preocúpate de revolver bien, para luego añadir el coco picado. Sólo cuando los 3 elementos estén incorporados, agrega el jugo de limón.
Finalmente, vacía el relleno sobre la masa cocida, y hornea nuevamente por 20 minutos. Una vez que notes que el relleno está algo endurecido, es hora de retirarlo del horno.
Deja reposar por 1 hora y sirve.
¿Te diste cuenta lo simple que fue?
Ahora no dudes en acompañarlo de un delicioso café helado o un refrescante té helado. Es riquísimo.