Yo soy de las que piensan que menos es más, y con esta sencilla receta les demostraré que es muy fácil hacer una salsa para pastas, sin siquiera encender la hornilla. Es una salsa fría a base de tomates y para los amantes del ajo.
Para hacer una salsa que te rinda dos platos necesitarás:
2 o 3 dientes de ajo (depende de tu gusto por el ajo)
3 tomates pera
Sal
2 cucharadas de aceite de oliva
Perejil o albahaca opcional
Preparación:
Lava bien los tomates y rállalos por la parte fina del rallador. Poco a poco hasta que sólo te quede la piel.
Machaca los ajos bien. Mézclalos con los tomates y las dos cucharadas de aceite de oliva.
Y aunque no lo creas, ya está lista tu rica salsa. El perejil y la albahaca son opcionales, porque ya la salsa es bien aromatizada con el ajo.
La puedes mantener en un frasco de conserva hasta por una semana.
Es importante que sepas que mientras más conserves la salsa, más fuerte será el sabor a ajo…