Los “pumpkin spice lattes” (o lattes de calabaza) son grito y plata en el hemisferio norte durante esta época del año, ya que representan todo el espíritu del otoño y la fiesta de Halloween que allá se está viviendo. Derivados de los clásicos pie de calabaza, esta receta se ha ido adaptando para convertirse en un té bebestible, condimentado con nuez moscada y canela y como base el puré de calabaza.
Aquí en Chile sin embargo, entramos a la primavera, y aunque no podemos estar más lejos del espíritu otoñal estadounidense, parece buena idea probar esta receta tan codiciada, aprovechando que están apareciendo las primeras pequeñas calabazas en los supermercados.
A diferencia de ellos que consumen esta bebida caliente, la cambiaremos para convertirla en un delicioso smoothie de calabaza, fresco, dulce y perfecto como opción para tus desayunos o incluso como snack saludable.
Ingredientes (para tres porciones de una taza)
- Calabaza, puedes conseguirla en el mercado como puré o en la zona de vegetales.
- 2 plátanos congelados (grandes).
- 2 tazas de leche (resultan mejor en esta receta las leches vegetales, como la de almendra o de avena).
- ½ taza de miel de abejas.
- ½ cucharadita de canela.
- ½ cucharadita de nuez moscada.
- Una pizca de pimienta.
- 1 taza de hielo.
Preparación del smoothie de calabaza
Comienza cortando la calabaza en trozos hasta reunir aproximadamente una taza y media. (Si adquiriste calabaza en puré, omite este paso). Cuécela en agua con ½ taza de azúcar (en una olla a presión durante 20 a 30 minutos, en una olla normal requerirá aproximadamente 40 minutos hasta que adquiera una textura blanda).
En una licuadora, añade la leche y los plátanos y procésalos por unos segundos. Agrega el hielo y la miel.
Incorpora la calabaza en la licuadora y continua procesando los ingredientes, añadiendo entonces las especias.
Continúa licuando hasta que logres la textura deseada. Si quieres llegar hasta una consistencia más liquida agrega más leche o agua.
Sirve en un vaso de vidrio. Decora tu smoothie de calabaza con nueces picadas y canela.
¿Qué te parece esta peculiar receta? Si deseas hacer de esta receta una alternativa vegana, reemplaza la miel de abejas por jarabe de maple y usa una leche vegetal. El sabor resultará el mismo y la textura también. ¡A disfrutar!