Esta receta la comencé a preparar luego de descubrir las bondades de la polenta. No cabe duda que es una de las mejores compañeras de las preparaciones otoño-invierno, no sólo por todas sus propiedades, sino también porque su sabor es único además de ser fácil de preparar.
Ingredientes
4 tazas de agua fría (también puede ser leche)
2 tazas de polenta.
3 cebollas
2 pimentones
Ajo
Sal y comino a gusto
Preparación
Colocamos las 4 tazas de agua en una olla y vaciamos la polenta. Mientras realizamos este procedimiento, debemos revolver constantemente para evitar que la polenta se agrume. Luego agregamos el comino. La cantidad depende de cuanto realce quieras darle a la preparación. Lo cocinamos a fuego medio revolviendo para evitar que se pegue.
Luego picamos las cebollas, los pimentones y el ajo en cuadritos y hacemos un sofrito con ellos.
Cuando ya la polenta comienza a espesar, comenzamos a revolver constantemente. Deben haber pasado unos 30 minutos aproximadamente desde el inicio de la preparación.
Luego mezclamos el sofrito con la polenta hasta alcanzar una mezcla compacta y homogénea.
Esta preparación es ideal para acompañar con una ensalada fresca, por ejemplo de tomate. También funciona muy bien con unas papas doradas. No cabe duda que si agregas algo de tu imaginación, esta receta llegará a ser una de tus favoritas.