Mundialmente conocidos son los beneficios que trae comer frutos secos. Pasas, nueces y almendras abundan en nuestra despensa para entregarnos lo mejor de sus nutrientes para mejorar nuestra salud y estilo de vida, al incluirlos en las más ricas recetas, dada su inmensa versatilidad. Hoy te enseñaremos a preparar un clásico de la nutrición vegana, que sin embargo se ha tomado las cocinas de todos. Se trata de la leche de almendras, la cual, a diferencia de la leche de origen animal, no contiene colesterol ni lactosa, aunque contiene menos proteínas. Por lo demás, es muy sabrosa y fácil de preparar. ¿Te animas?
Ingredientes (1 litro)
-1 taza de almendras
Preparación En un recipiente con abundante gua, remojar 1 taza de almendras toda la noche.
Al día siguiente escurrirlas, desechar el agua del remojo. Licuar por 2 minutos las almendras remojadas y escurridas con 1 litro de agua cocida o agua mineral sin gas.
En una fuente o jarro colocar un colador, sobre el colador colocar un trozo de gasa o un paño limpio, verter la mezcla obtenida, exprimir bien, eliminando la pulpa obtenida. Esta leche de almendras se conserva por 5 días refrigerada.
Lo bueno de esta rica Leche de almendras es que no sólo se puede disfrutar sola, sino que también es posible agregarla en batidos, postres y un sinfín de recetas que lograrán rescatar lo mejor de su intenso sabor. ¡Una verdadera delicia de la naturaleza!