La hora del té también es un perfecto momento para comer rico, y sin mayor esfuerzo. Es que se puede contar con preparaciones dulces que son muy fáciles de hacer en casa; tal como la que te mostramos a continuación: küchen de nuez.
Necesitas:
Para la masa
- 1 ½ taza de harina
- ½ taza de leche
- ½ taza de azúcar
- 1 ½ cucharadita de polvos de hornear
- 2 yemas
- 3 cucharadas de margarina blanda
Para el relleno
- 1 tarro de leche condensada
- 1 taza de nueces picadas
- 1 huevo
- 3 cucharadas de margarina blanda
Preparación:
Enmantequilla un molde de 25 centímetros de diámetro. Reserva.
Precalienta el horno a 180 grados.
Bate la margarina con el azúcar, hasta lograr un líquido sin grumos. Agrégale las yemas, bate, e incorpora los polvos de hornear y la harina, alternando con la leche. Mezcla bien hasta que se forme una pasta.
Vacía la mezcla en el molde, de manera de que quede de unos 2 centímetros de altura. Hornea por 20 minutos.
Mientras tanto, realiza el relleno. En una olla pon la margarina, la leche condensada y las nueces. Caliéntalas a fuego lento, y revuelve hasta lograr un tono acaramelado. Una vez listo, retira del fuego, agrega el huevo y mézclalo con el resto de los ingredientes.
Saca la masa del horno (si se hincha, dale unos pinchazos con un tenedor), y agrégale las nueces acarameladas. Hornea por 25 – 30 minutos.
Retira del horno y ¡voilá! Tu kuchen de nuez está listo para servir. Acompáñalo con algún tipo de café, té o jugo. Viene súper.