Los merenguitos siempre serán una rica opción para picotear algo dulce, ya que su sabor es delicioso y su preparación no es muy difícil. Hoy haremos unos suspiros de merengue, que en realidad sólo se distinguen de los merengues tradicionales en que son más suaves y que éstos los haremos de chocolate.
Ingredientes (para 30 suspiros aproximadamente):
-3 claras de huevo a temperatura ambiente
-8 cucharadas de azúcar normal
-3 cucharadas de azúcar flor
-1 cucharada de cacao en polvo
-Chocolate para derretir
Preparación:
Comenzaremos haciendo un típico merengue, por lo que ponemos nuestras claras a temperatura ambiente en un bowl y comenzamos a batir. Mientras tanto, ponemos a calentar nuestro horno a 100 grados.
Cuando haya subido nuestra mezcla iremos añadiendo de a poco nuestro azúcar, pero es importante que lo hagamos cuando nuestro merengue ya haya agarrado consistencia.
Luego añadiremos poco a poco nuestro azúcar flor. Este paso es importante, ya que este tipo de azúcar es el que le dará una consistencia más suave a nuestros suspiros.
Cuando esté integrada toda el azúcar, pondremos el cacao en polvo y así ya tendremos nuestro merengue de chocolate.
Debemos batir hasta que todo esté bien mezclado y el merengue siga con una consistencia dura. No debemos sobre batir.
Ponemos nuestros merengues en una plancha de silicona o papel de cocina y les damos la forma que deseamos. La idea es que queden puntudos o redondos con una punta.
Los meteremos al horno por 45 minutos a 100 grados y luego una hora más pero a la temperatura mínima. Es importante hacer este cambio de temperatura, ya que si no los merengues pueden ir abriéndose con el calor. Luego esperamos que se enfríen y pondremos la base en el chocolate derretido para que en la parte de abajo quede dura y más rica.
Después tienes dos opciones, puedes dejarlos así, sólo con el chocolate, o puedes ponerle una base de galleta, como por ejemplo, la de las galletas Oreo o Tritón.