El vodka (que en eslavo significa agüita) es una bebida alcohólica de origen europeo (está en debate si su origen específico es ruso o polaco), que en los últimos años se ha vuelto bastante popular entre los chilenos. Está hecho a base de granos y hortalizas cuyo principal componente es el almidón, como la papa o el centeno. Su sabor es suave y neutro, pero con un alto grado alcohólico (en promedio 40 grados) lo que lo hace ideal para distintos tipos de preparaciones y que va muy bien combinado con agua tónica o con cítricos como la naranja, pero en general su espectro es muy amplio, siendo el alma de famosos tragos como el Bloody Mary, Ruso Blanco y Negro, el Martini, el Cosmopolitan o la Caipiroska.
Lo que más nos gusta del vodka es que muchas marcas ofrecen una gran variedad de sabores como alternativa al vodka tradicional, basados en frutas y especias, para hacer de cada preparación con esta bebida alcohólica una experiencia única. Sin embargo, nosotros mismos podemos hacer nuestro vodka saborizado, que será mucho más natural y sabroso que el original. En esta oportunidad haremos un vodka mandarina casero, cuya preparación es muy sencilla y solo tendrás que armarte de paciencia, porque debemos dejarlo reposar durante un tiempo para que adquiera todo el sabor de la fruta.
Ingredientes
3 mandarinas medianas y maduras
500 ml de vodka (recuerda que no debe ser saborizado, escoge uno clásico de buenas marcas, como Absolut, Skyy o Stolichnaya)
Además, necesitamos un pelador de papas (puede ser un cuchillo común), tela o papel para colar y un frasco con tapa, tipo "mason jar" como el de la foto.
Preparación
1. Usaremos la cáscara, por lo tanto, debemos lavar bien las mandarinas. Al pelarlas, tratar de sacar solo la parte naranja, evitando lo blanco (albedo) que es amargo.
2. En el frasco, verter el vodka. Agregar las cáscaras de mandarina y tapar bien.
3. Guardar nuestro vodka mandarina casero en un lugar oscuro durante al menos un par de semanas. Si es más, mejor aun. Con el tiempo adquirirá un lindo color dorado.
4. Transcurrido ese tiempo, cuela tu infusión con un papel filtro o tela de lino y vierte en un frasco limpio. Refrigera y luego sirve como prefieras.
Esta preparación es tan atractiva y deliciosa que puedes hacerla para regalar, poniendo al frasco una bonita cinta con una etiqueta. ¿Te animas a hacer tu propio vodka mandarina casero?