En mi constante búsqueda de platos ricos y saludables basados en frutas, me topé con este rico Cremoso de frutillas, postre que logra rescatar lo mejor de esta roja fruta por medio de la mezcla perfecta de diversos ingredientes, como lo son la leche condensada, la gelatina y las frutillas frescas. Se trata de una preparación nutritiva, sana, fresca y de agradable sabor. Presentado en forma individual, se transformará en la mejor parte del almuerzo. ¡Todos dejarán un espacio para él después de una gran comilona!
Ingredientes (8 porciones)
-1 caja de gelatina grande sabor frutilla
-1 tarro de leche condensada
-½ kilo de frutillas
Preparación Lavar las frutillas, retirar las hojas, separar 8 frutillas para decorar, el resto picarlas y reservar. En un recipiente disolver la gelatina en 3 tazas de agua caliente, incorporar la leche condensada y mezclar con batidora o batidor de globo. Agregar las frutillas picadas mezclándolas suavemente.
Verter la preparación en copas o pocillos, llevar a refrigerar hasta que cuaje.
Al momento de servir, decorar con crema, hojas de menta y las frutillas reservadas.
ç
Si un postre tiene entre sus principales atributos a la cremosidad, para mí ya sumó un punto importante para estar dentro de mis top ten. De hecho, este Cremosos de frutillas podría incluso incluir los top five de mis recetas dulces favoritas, ya que no sólo llama la atención de mi paladar por su textura, sino que también por su frescura y combinación de sabores. ¡No te arrepentirás!