3 refrescantes formas de preparar Té Helado

El verano es sinónimo de bebidas refrescantes, de esas que te sientas en tu terraza a disfrutar y el vaso se empaña de lo frías que están. ¡Me encanta eso!

Por eso hoy les dejo 3 recetas de té helado, una preparación que además de rica tiene menos calorías que una gaseosa o un jugo y es mucho más hidratante. Acá van:

Té Helado Clásico Necesitas:

Hojas de té o bolsitas (puede ser té verde o de la variedad que quieran).

Algún endulzante (azúcar rubia, miel o stevia)

Agua Hervida.

Preparación:

Si vas a preparar té en hoja, hazlo con ¾ partes más de agua que lo habitual. Calcula lo mismo si lo harás con té en bolsitas y endulza con lo que prefieras, a gusto. La idea es que sea mucho menos concentrado que como sueles tomarlo.

Para servir, llena el vaso hasta la mitad y la otra mitad cúbrela con hielo granizado o cubitos de hielo.

Té Verde con Limón y Menta Necesitas:

Agua hervida

Té verde (en hoja o bolsitas)

Hojas de menta

1 Limón (por litro)

Endulzante

Foto vía lefork.com Preparación Hierve el agua en una olla. Cuando esté lista, agrega las cáscaras de un limón, hojas de menta y el té preparado (o las bolsas) y hierve por 2 minutos más para que los sabores se impregnen y el té se aromatice.

Luego endulza y deja enfríar. Para servir, añade mucho hielo, rodajas de limón y hojas de menta fresca. ¡Una delicia!

Té Helado con Frutillas y Albahaca Necesitas:

Te recomendamos té negro, pero como siempre, puedes variar la receta a tu gusto.

1 kilo de frutillas picadas

Agua

Endulzante (del tipo que quieras)

Albahaca fresca

Hielo

Foto vía wikihow.com Preparación Lo primero es preparar el té. Recuerda hacerlo con tiempo para que este pueda reposar.

Por otra parte, disuelve el azúcar, miel o endulzante en una taza de agua hervida, agrega la albahaca y deja reposar unos 10 minutos. Luego agrega las frutillas picadas a esa mezcla y deja que todos los sabores se impregnen.

Una vez que eso esté frío, añade esta mezcla al jarro de té que preparaste previamente y refrigera. Sírvelo con mucho hielo y reemplaza las hojas de albahaca por unas frescas.

¡Queda realmente exquisito y refrescante! Foto princial vía mishkanyc.com