Se acerca el fin del verano, y después de las vacaciones donde siempre hay Happy Hour en terrazas, asados, tardes de playa llenas de palmeras y cuchuflí, pastel de choclo, humitas y tantas otras cosas deliciosas que se comen durante el verano, es muy probable que la mayoría haya ganado un par de kilitos. Pero para bajar esos kilos ganados no tienes que morir de hambre, solo debes comer 5 veces al día, con alto contenido protéico, bajo contenido de carbohidratos y bajo contenido calórico. A continuación te dejo una guía de alimentación saludable. Si sigues esta guía por unas 2 semanas, te aseguro perderás esos kilitos demás.
Desayuno: Como todos saben es la comida más importante del día. Trata de evitar los carbohidratos provenientes de harinas y azúcares procesados. Toma un jugo de fruta, de la que tú quieras preparado en casa con 1 fruta (1 manzana, ó 1 durazno, ó 1 ciruela, etc). Prepara un omelette batiendo un huevo (si concideras que es poco, agrega una clara adicional) agrega jamón de pavo, pechuga asada o cocida, aliña con sal y lleva al sartén. Si tienes sartén de teflón no es necesario ocupar aceite. Trata de evitar el aceite, si no puedes, usa aceite de oliva o pepita de uva. Toma té o café con endulzante, si gustas puedes cortar con un poco de leche.
Colación: Es muy importante comer en pocas cantidades pocas veces al día. Esto mantendrá activo tu metabolismo y se te hará más fácil perder peso. A media mañana, unas 2 ó 3 horas máximo desde que tomaste desayuno come una pequeña colación. Es importante que esta colación sea alta en proteínas, por eso prefiere jamón de pavo y quesillo. Si eres de los que gusta de lo dulce puedes optar por una fruta pequeña. Almuerzo: En el almuerzo, nuevamente debes tener un alto contenido protéico. Aquí hay una gran variedad de cosas que puedes usar. Carnes rojas magras como un trozo de lomo, pescados blancos como merluza, atún o corvina, carnes blancas como pollo o pavo. Cuando prepares tu proteína, prefiere el horno o la parrilla, de esta forma no tendrás necesidad de utilizar aceite. Para darle un toque más delicioso, utiliza especias como eneldo, romero o curry. De acompañamiento utiliza verduras verdes y blancas. Lechuga, apio, repollo, espárragos, coliflor, etc. Trata de ir mezclando y variando las verduras que utilizarás, así será más fácil mantener la dieta por un tiempo prolongado. Después que hayas bajado los kilos que querías, puedes usar como acompañamiento arroz o fideos, o papas, etc. Sólo preocúpate que no consumas estos alimentos más de 3 veces por semana. Si te gusta comer algo dulce después de almuerzo, ten siempre a mano gelatinas light. Son muy sabrosas y viene en una gran variedad de sabores. Otra opción, para los amantes del chocolate es comer 1 cuadrito de algún chocolate que tenga más del 70% de cacao. De estos también puedes encontrar una gran variedad en tiendas especializadas y supermercados.
Colación: En la tarde también es importante comer una merienda. Trata de no comer frutas a esta hora (ni más adelante en el día) ya que por la tarde el metabolismo se pone más lento y cuesta más digerir los azúcares contenidos en la fruta. Para esta hora come nuevamente quesillo y/o jamón de pavo. Si no quieres repetir lo de la mañana puedes optar por palitos de apio o zanahorias baby (no más de 4).
Cena: Esta comida es muy importante, ya que te aportará gran parte de la energía que el cuerpo utilizará mientras duermes en los procesos de repación que el cuerpo lleva a cabo durante la noche. Trata de que esta última comida sea al menos 2 horas antes de ir a dormir. Come una buena porción de proteínas, carnes magras, rojas o blancas, o 1 huevo. Acompaña con abundante ensaladas verdes.
Si eres fanático de las carnes rojas, no tienes que dejar de comerlas, procura cocinarlas al horno o la parrilla y comer una porción aproximadamente del porte de la palma de tu mano ¡muy sano!
Ten siempre en cuenta que si te da hambre entre medio de cualquiera de tus comidas, siempre puedes comer quesillo, jamón de pavo, huevo o gelatina. Otra recomendación es tomar abundante agua, al menos 2 litros al día, eso sí, evita a toda costa las bebidas de fantasía, aunque sean light, prefiere siempre el agua purificada o incluso el agua de la llave. Verás que no es tan difícil y que no hay necesidad de morir de hambre para bajar esos kilitos de más, ¡Hagan el intento! Verán que los resultados son muy efectivos. Foto CC Vía Flick