El otro día compartí con mi familia una exquisita comida que vino secundada por el invento de una tía: una delicia azucarada que derrotaba ampliamente cualquier tipo de dieta y, por añadidura, al pariente diabético. Pero ese no fue el caso porque nadie sentado a aquella mesa la padecía. Claro, nunca tan sádicos. Tampoco mi idea es jactarme de la salud de mi familia, mi intención es otra: cuando recostaba mi adolorido estómago por la orgía de glucosa, pensé, no sólo en los diabéticos, sino en la absoluta falta de necesidad para consumir aquella cantidad de azúcar. No es normal que un cuerpo quede tan agotado, como si dormir fuera la única solución, después de una comida normal y un trozo de postre… bueno, dos. En fin, no es sano. Y si eres diabétic@, es una trampa mortal. Por lo mismo te dejo otra receta para que, en caso que aparezcan en tu casa esos parientes fanáticos del dulce, puedas demostrarles que hay opciones menos mortales que la “diosa blanca”. Atención: Souffle Chocolate frío Ingredientes (6 personas): - 1 taza chocolate amargo rallado. - 2 tazas de leche descremada. - 1 cucharada de esencia de vainilla. - 20 gotas de stevia. - 4 huevos. - 1 cucharada de gelatina en polvo sin azúcar y sin sabor. - 1 taza de crema 0%. Preparación: 1.En un pyrex disuelve el chocolate en leche tibia y agrega la gelatina diluida en un poco de agua caliente. 2.En un bol, bate los yemas con la stevia hasta que formen globitos. 3.Agrega a esta preparación la mezcla de chocolate y la vainilla. Mezcla bien. 4.Bate las claras a punto de nieve y una a la preparación anterior. Revuelve. 5.Vierte a una cómpota o pyrex y lleva al freezer durante 1 horas más o menos, o hasta que cuaje. 6.Sirve sin desmoldar. 7.Cubre con la crema ligeramente batida. Y si no quedas satisfech@ con esta receta, no porque sea mala, porque no lo es, sino porque además del postre necesitas un tecito junto a una cosita dulce, puedes revisar esta sabrosa receta para preparar un queque light con stevia. Además, tienes varios lugares donde comprar ingredientes inofensivos y ricos, como Granero del Goloso, o La Chakra. Foto CC vía Flickr