Si eres del sur, seguro sabes qué son y cómo preparar digüeñes. Pero para nuestros amigos que no los conocen, les contamos que son unos hongos silvestres comestibles que crecen en árboles como el roble, el hualle o el raulí. Los digüeñes son endémicos de la zona sur, es decir, no existen en ningún otro lugar del planeta, y solo se dan durante un par de meses en primavera, aspectos que los hacen muy exclusivos, a pesar de su sencillo origen. Los digüeñes parasitan estos árboles y son recolectados por la gente de la zona para su venta. Afortunadamente hoy no cuesta tanto encontrarlos en Santiago y otras ciudades del resto del país, pero su precio es elevado, por lo que muchos se conforman como comerlos una sola vez por temporada. También son exportados a países como Estados Unidos o Japón.
Con todos estos datos, cualquiera que no los ha probado pensará que su sabor es espectacular, pero la verdad es que es su textura lo que cautiva, ya que su sabor es más bien insípido. Y es que los digueñes son hongos bastante porosos, que en su interior tienen una especie de "baba" que a muchos les parece repulsiva, sin considerar además su aspecto que aterroriza a cualquiera que padece de tripofobia. Pero a pesar de ello, tienen muchos adeptos (me incluyo) que celebran la llegada de la primavera por la posibilidad de comerlos nuevamente.
Imagen CC: Jardín Botánico Nacional, Viña del Mar, Chile
¿Cómo preparar digüeñes?
A pesar de que hay varias recetas que incluyen estos honguitos, como empanadas, o la clásica paila de huevos revueltos con digueñes, les enseñaré cómo preparar la típica ensalada de digüeñes con limón y cilantro.
Ingredientes:
Digueñes
Limones
Cilantro
sal de mar y aceite (opcional)
Preparación:
- Lava los digüeñes con cuidado, dejando a un lado aquellos demasiado maduros que se desarman al tocarlos.
- Córtalos en mitades o en rodajas según su tamaño, y ponlos en un bowl.
- Exprime limones para extraer una buena cantidad de jugo para nuestra ensalada. Lava y pica el cilantro.
- Añade el jugo de limón, el cilantro la sal y el aceite. Revuelve bien, pruébalos para cerciorarte que no les falte limón ni sal, y sirve de inmediato.
Como ves, no se necesita ser un gran cocinero para saber cómo preparar digüeñes, al menos no para esta simple pero sabrosa ensalada que puede ser el acompañamiento perfecto de cualquier plato chileno. ¡Anímate a probarlos antes que se acaben! Todavía estás a tiempo.