Muchas veces nos privamos de ciertas recetas porque contienen alimentos que no podemos comer, ya sea por algún tipo de alergia o porque nos "caen mal", o que simplemente no nos gustan. Pues, si entre tus alimentos prohibidos se encuentran el arroz, las pastas, el azúcar o el té, presta atención a estos tips sobre alimentos que pueden reemplazar a otros alimentos... Pueden ser tu salvación.
1. La quinoa por arroz
La quinoa es una semilla que, debido a sus peculiares características, también es considerada un cereal. Por ello es que puede ser utilizada en múltiples preparaciones, incluso como reemplazante del arroz. Además es una fuente natural de proteínas y grasas, más que cualquier otro cereal, y lo mejor, es que las grasas que contiene no son saturadas, sino que totalmente positivas y requeridas por nuestro organismo. Si eres celiaco, la quinoa puede ser tu mejor aliado, ya que ¡no contiene gluten! Su preparación es igual de amistosa que su composición: sólo debes lavarla (no remojarla), colarla y luego ponerla a cocinar de 15 a 20 minutos, al igual como lo harías si estuvieses preparando arroz, ¡y listo!
2. Avena por arroz o pastas en las sopas
La avena es otro cereal que reporta múltiples beneficios a nuestra salud y que puede ser usado en variadas preparaciones. Si sufres de dislipidemia (tienes problemas de colesterol alto) o de diabetes, este alimento puede transformarse en tu mejor amigo, ya que gracias a su gran contenido de fibra y antioxidantes, ayuda a combatir estas enfermedades. Además, produce una sensación de saciedad que es capaz de controlar a cualquier apetito voraz. Puedes usarla en distintas sopas, reemplazándola por el arroz o las pastas que normalmente incluyan estas recetas (como carbonadas o cazuelas). Incluso en otras preparaciones que les consideren (guisos, por ejemplo); sólo tienes que añadirla (prefiere la avena instantánea) directamente a la sopa, como lo harías con el arroz o las patas, considerando que ésta estará lista en la mitad del tiempo. Gracias al almidón que contiene este cereal, el resultado será muy similar y no extrañarás la ausencia de otros carbohidratos.
3. Té de zanahoria por té tradicional
Si el té tradicional o té negro no te sienta bien, anímate a preparar tu propio "té" de zanahoria. La zanahoria es un vegetal digestivo y diurético que habitualmente consumimos en ensaladas o como agregado en diferentes comidas, pero también puede consumirse como infusión. Para realizar el té, sólo hace falta rallar unas cuantas zanahorias, ponerlas a secar sobre una estufa o en el horno a fuego medio -sin dejar que se queme- por uno 15 minutos y luego agregar una cucharada de este preparado a una tazada de agua caliente, ¡y listo! Podemos endulzar , si lo deseamos, con miel, canela o clavos de olor. ¡Atrévete!, su sabor y aroma seguro te cautivarán.4. Miel por azúcar La miel le gana por lejos al azúcar si de propiedades nutricionales se trata. Pero también en sabor, le hace justa batalla. La miel tiene una textura y un sabor dulce natural, que permite que la utilicemos en toda preparación que tradicionalmente lleve azúcar: bebidas, postres, bollería, etc. Existe un sinfín de posibilidades. Si estás luchando contra el sobrepeso y, por ende, evitando todo lo dulce debido a su alto contenido de azúcares, ya no tendrás que privarte más de todo aquello; reemplaza la dosis de azúcar por miel en tus próximas recetas y tu metabolismo te lo agradecerá.
Como ves, la naturaleza es sabia y siempre nos brinda opciones. No te quedes más sin probar tu plato favorito, ni te saltes la hora del té... Prueba estos tips sobre alimentos que pueden reemplazar a otros alimentos, descubre nuevos sabores y ¡déjate sorprender!