Las galletas son una excelente opción para tener a la hora del té, al desayuno, o cuando a uno le da un poquito de hambre a mitad de la jornada. Ya sean de limón, de avena o, en este caso, de mantequilla, siempre serán un aliado para tener a disposición. Las galletas que les enseñaré hoy son súper fáciles de hacer, pero no por eso menos ricas.
Ingredientes (para 60 galletas pequeñas):
-200 grs de mantequilla a temperatura ambiente
-100 grs de azúcar flor
-1 huevo
-1 cucharadita de esencia de vainilla
-350 grs de harina sin polvos
-200 grs de cobertura de chocolate (opcional)
Preparación:
Precalentamos el horno a 160 grados. En un bowl mezclaremos la mantequilla con el azúcar flor con una batidora. Nos debe quedar una crema amarilla clara.
Cuando ya veamos que están totalmente integradas, añadiremos un huevo y la esencia de vainilla. Seguimos batiendo hasta que todo esté mezclado.
Luego añadiremos el harina, pero es importante en este paso cambiar las varillas de batir por las de amasar (las de espiral) y juntamos nuestros ingredientes. Cuando veamos que ya está prácticamente todo unido, lo sacamos del bowl y amasamos un poco hasta conseguir una bola.
Nota: no hay que sobre amasar, ya que como estamos trabajando con mantequilla, el calor hace que se vaya derritiendo.
Amasamos con un uslero y hacemos las figuras que querramos. Yo las hice redondas, porque era lo más rápido y no había ocasión especial de por medio, sólo disfrutar de unas ricas galletas.
Horneamos entre 15 y 20 minutos, hasta que veamos que el borde de nuestars galletas está dorado. Las galletas se pueden comer solas o podemos bañarlas en chocolate, y como podrán haber visto en la receta de los cakepops o las galletas de nutella, sabrán que esta es mi opción favorita.