Hace un par de años una amiga me enseñó una exquisita receta de cheesecake, fácil, sencilla, pero a la que había que esperar largo rato en el horno. Hoy a la misma receta le cambié la formula, y en vez de hacerla al horno, simplemente la deje enfriar en el refrigerador, lo que permite, según tus habilidades culinarias, que puedas preparar tu cheesecake en tan sólo 15 minutos, ¿qué tal? Vamos a ver cómo queda este delicioso postre.
Ingredientes (para 15 personas)
-2 paquetes de galletas dulces
-150 gramos de mantequilla
-2 paquetes de queso philadelfia
-3 huevos
-1 taza de azúcar
-1 caja de crema
-1/2 taza de harina
-2 cucharadas de esencia de vainilla
-Mermelada
-Frutos rojos
Paso a paso
Lo primero que haremos será moler nuestras galletas que serán la base de nuestro pastel de queso. Para molerlas pueden ocupar el mortero o una minipimer, lo importante es que queden bien molidas. Una vez que estén listas, las mezclaremos con la mantequilla previamente derretida, integramos bien, y luego cubrimos el molde que ocuparemos para hacer el cheesecake, con las galletas. Dejamos la base en el refrigerador y avanzamos hacia el siguiente paso.
Ahora prepararemos el relleno del cheesecake. Para comenzar batiremos el queso crema, aquí recomiendo tener mucha paciencia porque al ser cremoso no es tan sencillo de batir. Posteriormente agregaremos los huevos de a uno y seguiremos batiendo. En orden, luego añadiremos azúcar, esencia de vainilla, harina y crema. Una vez listo nuestro relleno, sacaremos la base del refrigerador y la cubriremos con la mezcla de queso philadelfia.
Ahora, lo llevamos al refrigerador durante toda la noche. Si quieren que su postre tenga mayor consistencia y esté más frío, también pueden dejarlo en el congelador. Al día siguiente cubrimos la mezcla con la mermelada y agregamos frutos rojos a gusto.
Y listo, ahora sólo queda servir y disfrutar de un riquísimo cheesecake, que tarda poco en preparar, pero que nos invita a cultivar la paciencia para degustarlo. Pero tranquilos comensales, que con el cheesecake, siempre valdrá la pena la espera.