Cuando uno piensa en un pastel, casi siempre le viene a la mente una apetitosa tarta de chocolate. Las zanahorias, sin embargo, suelen estar más asociadas con los platos salados. Pero con este bizcocho de zanahoria y nueces, el concepto de las tartas va a cambiar. Porque aparte de sorprender por su excelente sabor, se puede degustar sin culpa, ya que está hecha con harina integral de espelta, que la hace más saludable y nutritiva.
La receta es muy sencilla, perfecta para cuando no se tiene mucho tiempo y se necesita preparar un buen postre.
Ingredientes:
- 300 gr. de harina integral de *espelta
- 270 gr. de azúcar moreno de caña integral
- 130 gr. de nueces
- 300 gr. de zanahorias
- 200ml. de leche vegetal (soja, arroz o avena)
- 180 ml. de aceite de girasol
- 1 cucharadita de canela
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 2 cucharaditas de levadura química
- 1 vaina de vainilla (abrir la vaina y usar las semillas)
- 1 cucharadita de sal
Para el glass de naranja:
- 100 ml. de zumo de naranja
- 250 gr. de azúcar moreno de caña integral (se puede hacer también con azúcar glass, pero evidentemente no será tan saludable)
En un bowl mezclamos todos los ingredientes sólidos: la harina, el azúcar, las nueces, la canela, la sal, el bicarbonato, la levadura y la vainilla. Lo removemos todo y reservamos.
En otro bol o vaso largo, mezclamos los líquidos: la leche y el aceite.
Rayamos la zanahoria y la incorporamos a la mezcla de los sólidos.
Vamos incorporando la mezcla de los líquidos, removiendo bien para que todo quede integrado.
Se puede pasar por la batidora si preferimos no encontrar trocitos de zanahoria y nueces.
Lo vertemos todo en un molde de horno previamente untado con aceite y lo dejamos unos 30 minutos o hasta que al pinchar el bizcocho con un palillo nos salga limpio.
Mientras el pastel está en el horno, hacemos el glaaa. Para ello, en un pequeño cazo mezclamos el zumo de naranja con el azúcar y vamos removiendo hasta que el azúcar se haya desintegrado.
Lo dejamos enfriar para que la mezcla espese y quede con una textura parecida a la miel.
Una vez sacado el bizcocho del horno, lo pintaremos con el glass. ¡Et voilà! A disfrutar.
*La espelta es una variedad del trigo muy antigua más digerible que el trigo común. No ha estado manipulada por lo que es más más pura. Es rica en fibra y ácidos grasos esenciales".