¿Has pensado alguna vez en comer los interiores del vacuno? Muchas veces no los tomamos en cuenta para nuestras creaciones gastronómicas. Si bien no todo se puede aprovechar y a algunos no les agradan, estas menudencias son muy sabrosas, siempre y cuando sepas prepararlas. Acá te contamos cuáles son las más usadas y te dejamos con varios datos.
Hígado
También llamado "panita", en Chile. Es el hígado fresco del vacuno y se puede preparar de varias formas. Lo primero que debes tener en cuenta es que su textura es algo dura y seca, por lo que debes cortarla como si fuera un bistec. Para cocinarla, te recomendamos primero condimentarla con ajo, comino y orégano. Luego, la debes pasar por harina cruda sin polvos de hornear y freírla hasta que tome un color marrón. La puedes servir con arroz o con ensaladas mixtas. La pana tiene un gran aporte alimenticio, ya que es rica en fierro y ayuda a evitar la anemia. Es muy económica y fácil de encontrar en carnicerías de barrio.
Riñones
Otro interior muy apetecido por los amantes de la carne. Si bien tienen un sabor algo amargo y una textura blanda, son muy sabrosos. Acá se recomienda comerlos bien cocidos y con muchos condimentos. El plato más conocido es de origen español y se denomina "riñones al jerez" . Sin embargo, también se pueden hacer con vino tinto, blanco u otro licor dulce. Lo importante es que los laves muy bien antes de cocinarlos y trates de que estén lo más frescos posible. También puede hacer estofados, ya que entregan un caldo muy sabroso y reponedor.
Estómago
Comúnmente llamado "guatitas". Es la parte más blanda del estómago y se puede hacer de variadas formas. Tiene una textura algo elástica y dura, pero sabrosa al paladar. Te recomendamos hacerlas "a la jardinera". Primero debes cocerlas en una olla a presión y luego hacer con ellas un guiso con verduras. Las puedes acompañar con papas fritas o un arroz primavera. También puedes hacer una sopa de guatitas, con papas, cebollas y muchos condimentos. De verdad, es uno de los interiores más sabrosos que podrías probar.
Ubres
Aunque no lo creas, las ubres de vaca son un manjar dentro de la gastronomía. Muchas veces pensamos que este interior se bota y no es posible cocinarlo, pero no es así. Las ubres las puedes hacer de diferentes maneras: caldillos, guisos o a la parrilla. Esta última preparación te la recomendamos a ojos cerrados. Eso sí, antes de cocinar, primero debes condimentar con mucho orégano y comino, para luego cocerlas unos minutos en una olla a presión. Con este procedimiento, te asegurarás de que su textura sea blanda y tierna.
¡Ya lo sabes! Muchas veces no tomamos en cuenta los interiores del vacuno, sin saber cuán deliciosos pueden ser algunos de ellos. ¡Pruébalos y atrévete con tu propia preparación!