Dicen que el amor entra por los ojos, pero en el caso de la cocina esta frase se une directamente con el buen sabor, y es que una linda y entretenida presentación de la comida puede predecir el éxito de un gran plato. Y tal es el caso de estos Remolinos dulces, snacks hechos en base a una suave masa horneada de mantequilla y rellena de dulce de membrillo, una receta sencilla, de pocos ingredientes y que se destaca por su novedosa forma. ¡Y no sólo son lindos, también son exquisitos!
Ingredientes (12 porciones)
-500 gramos de harina sin polvos
-½ cucharadita de polvos de hornear
-100 gramos de mantequilla o margarina
-2 cucharadas de azúcar flor
-250 gramos de dulce de membrillo
-2 yemas de huevo
Preparación En un recipiente mezclar la harina, azúcar flor y los polvos de hornear cernidos, incorporar la margarina a temperatura ambiente, integrar con las manos, agregar pequeñas cantidades de agua hasta formar una masa suave y homogénea, reservar.
En una mesa enharinada, extender la masa con ayuda de un uslero, cortar cuadrados de 10 centímetros, hacer cortes en los extremos para formar el remolino, colocar un trozo de dulce de membrillo en el centro del cuadrado, humedecer con agua las puntas de la masa cortada, doblar las puntas formando el remolino, colocar otro trozo de dulce de membrillo en la unión de la masa, pincelar con yema batida.
Colocar los remolinos en la lata del horno enmantequillada, cocinar en horno precalentado, por 15 minutos hasta que los remolinos estén dorados. Retirar del horno, enfriar, espolvorear con azúcar flor antes de servir.
Quizás te dio pena comer estos deliciosos bocados de tan sólo mirar su atractiva forma. ¡Te entendemos, ya que son muy originales! Sin embargo, detente a mirarlos unos segundos y luego entrégate a estos irresistibles Remolinos dulces, y así entenderás la maravillosa dicotomía de la belleza y el sabor de la comida hecha con cariño. ¡Puro sabor hogareño!