Siempre a la hora de comer es rico acompañar la cena o el almuerzo con un buen vino. Eso sí, no todos saben qué vino es bueno para qué tipo de comidas. La mezcla entre el plato y el vino que lo acompañará según el tipo de comida y la preparación es lo que llamamos maridaje. Este vino será capaz de realzar y resaltar los distintos sabores que se encuentran en tu plato proporcionándote la mejor sensación de esa comida. Generalmente sólo maridamos nuestras comidas cuando vamos a un restaurante con somelier, el cuál nos recomendará la mejor opción que combine con todos los platos que hay en nuestra mesa.
Algunos restaurantes, como Boragó o House of Morande, ofrecen menús con maridaje, esto quiere decir que durante la cena, que puede tener 3 o 4 tiempos, cada uno de ellos va acompañado de su copa específica de vino para que te lleves la mejor sensación a tu boca.
Tú también puedes combinar tus mejores recetas con el vino adecuado, por eso aquí te dejo algunas opciones dependiendo de que sea lo que estás preparando.
1) Carnes Blancas Pollo y Pavo: Las carnes blancas generalmente se acompañan de vinos blancos. Sin embargo, cuando hablamos de Pollo y Pavo que a pesar de ser blancas, su textura, sabor y consistencia, es muy distinta a la de los pescados. Para ellos podemos elegir un Pinot Noir, que según dicen los entendidos, es el "Blanco de los Tintos". El Pinot Noir quedará muy bien con pollo o pavo en cualquier preparación, como asado o a la plancha, eso sí exceptuando aquellas preparaciones muy picantes excesivamente condimentadas, para esos casos preferimos un Chardonay que tiene mucha más fuerza y es capaz de sobresalir entre los sabores picantes.
Pescados: un Sauvignon blanc queda muy bien con la mayoría de ellos, sobre todo si los acompañamientos y preparaciones son con un toque agridulce.
2) Carnes Rojas En esta categoría tenemos principalmente la carne de vacuno, que si bien en general va bien con distintas cepas de vino tinto como el Malbec, el Cabernet Sauvignon, Carmenere, Merlot, etc. Algunos de ellos se adecuan más que otros según la preparación de la carne.
Para las carnes asadas o preparadas en salsas: se recomiendan vinos tintos jóvenes, es decir, con poco tiempo de elaboración, en este caso puedes elegir tu cepa favorita del 2011 o 2012 y quedará perfecta con tu preparación.
Para carnes como el Cordero o el Cabrito: que son carnes más grasosas y fuertes de sabor y aroma, un Syrah o un Carbernet Sauvignon son la mejor alternativa.
3) Pastas En el caso de las pastas si son sorrentinos, ravioles, fettuccini o cualquier otra, no es lo importante, lo importante aquí es la salsa que ocupemos. Es por esto que las pastas son muy versátiles.
Salsa a Base de Pescado: lo recomendado es un Sauvignon Blanc o un Chardonay fríos, a unos 9 o 10°C.
Salsa a Base de Carnes Rojas: una muy buena alternativa es el Merlot o incluso un Syrah si es que nuestra salsa es con ingredientes fuertes.
4) Mariscos Mariscos a la Plancha: quedarán muy bien con un Chardonnay. Este vino acompaña muy bien los aromas tostados que se liberan a la plancha.
Mariscos con crema: en estas preparaciones, donde predomina el sabor salado, se recomiendan vinos con un poco más de acidez, para neutralizar el salado. Para estas preparaciones un Sauvignon Blanc o incluso más interesante, la Champaña, son altamente recomendables.
5) Postres Para los postres que por lo general van a contener una gran cantidad de azúcar hay dos opciones. La primera será optar por vinos semi secos que por o general tienen un sabor más dulces como espumosos del tipo moscatel. Y finalmente el muy conocido Late Harvest ya que su alto contenido de azúcar logrará que se intensifiquen aún más los sabores del postre.
Las cepas que mencioné son las que tenemos principalmente en el mercado chileno.Si son buenos buscadores pueden arriesgarse con cepas extranjeras que cumplan con las características mencionadas y pueden sorprender aún más a sus invitados
Foto CC Vía Flickr