Unos parientes capitalinos aprovecharon de quedarse un fin de semana con nosotros en Chillán antes de continuar el viaje hasta Chiloé, su destino vacacional. Una tía, parte del grupo de viajeros, fanática de los inventos gastronómicos, y también de lo dulce, me cuenta que sabe preparar “manjarate casero”. Al día siguiente, se levanta temprano, parte al súper y antes que me dé cuenta ya tiene todo listo para deleitarnos con su postre-invento. Le ayudo dándome cuenta que las cantidades de azúcar superan con facilidad las recomendadas por nutricionista. Una modelo esquelética se habría muerto de impresión en esa misma cocina. Como habrán percatado, hoy no les vengo a prevenir de las cosas dulces. Pero tampoco voy a alentarlos para que las consuman. Por lo tanto, si tu salud es incompatible con la glotonería que voy a recetar, hazte un favor y deja de leer, a menos que te guste sufrir o tengas mucha fuerza de voluntad. Sin más preámbulos: Delicia azucarada, la invención de mi tía.
Ingredientes (16 personas): - 2 paquetes de galletas de chocolate.
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2 cajas de Vicio grandes.
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1 litro de crema.
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3/4 de kilo de manjar.
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1 sobre de gelatina sin sabor.
Preparación: 1. Tritura las galletas con la mano, y luego, con minipimer o licuadora, procesa los trozos hasta molerlos completamente. Reserva. No sirve el relleno de la galleta, así que la crema o lo que sea, a la basura.
2. Bate la crema hasta casi punto chantilly.
3. Prepara la gelatina.
4. Vacía a un bol el manjar y revuelve hasta que pierda un poco de consistencia. Luego vierte la gelatina tibia sobre el manjar y revuelve.
5. Vacía la crema casi a punto chantilly sobre la preparación anterior y revuelve.
6. Distribuye los Vicios en el fondo de una budinera y luego añade la mezcla del manjar, crema y gelatina.
7. Finalmente, cubre el contenido de la budinera con las galletas molidas, envuelve en alusa plast para que no se impregne de olores y sabores y guarda en refrigerador (no congelador) por 3 horas.
¿Qué quieren que les diga? Después de comer todos nos vimos en la obligación de dormir. No sé si fue porque el plato principal estuvo muy contundente, o porque nadie pudo negarse a la pregunta “¿más postre?”.
Si te pareció esto una grosería, te dejo esta receta donde aprenderás a preparar un rico y más sano budín de pan. Y si quieres averiguar sobre alternativas para cocinar postres sin azúcar, bueno, click en el link.