Esta receta es un clásico centroamericano. Es fácil, rico y, al menos para nosotros, original, porque es una forma de preparar al plátano a la cual no estamos acostumbrados.
Por eso, y gracias la ayuda de una amiga colombiana, me aventuré con la receta y aquí les dejo la preparación.
Ingredientes 4 plátanos verdes (no pueden ser plátanos comunes y corrientes, porque el sabor cambia completamente).
Aceite vegetal
Sal
Preparación Pela los plátanos con cuidado, ya que la cáscara es un poco dura y probablemente necesites la ayuda de un cuchillo. Mientras terminas esta tarea, pone un sartén a calentar con suficiente aceite para freír.
Cuando los hayas pelado, córtalos en porciones grandes y ponlos a freir, así tal cual en un aceite no muy caliente. Cuando veas que se están dorando (literalmente se ponen de color dorado), retíralos y déjalos enfriar un poco.
Luego, con la ayuda de una tabla o una superficie dura y plana, aplástalos con cuidado. Cuando hayas terminado este proceso, vuelve a incorporarlos en aceite caliente y vuelve a dorar por ambos lados.
Una vez listos, ponlos sobre papel absorbente y, como si fueran papas fritas, agrégales sal y sírvelos calentitos. Puedes usarlos tanto para un picoteo con amigos como para acompañar comidas.
¡Pruébalos no te vas a arrepentir!